el gran von foester

Aunque mi profesor de yoga, que es un verdadero guía, me enseñó recientemente que en la Era de Acuario desaparece el maestro exterior, siempre celebra una encontrar a un maestro que pueda acompañarte por bastante tiempo en el avance de la propia libertad.

No es fácil encontrar gente que pueda enseñarte cosas intensamente. Cuando te topas con uno de ellos, es como una fiesta. Me auguro muchos ratos de conversación deliciosa con este autor.

Y compartiendo con los lectores de este blog mi descubrimiento,  os cuento que ha llegado a mis manos la obra de un tipo excelente: Heinz Von Foerster. Austríaco genial de nacimiento, afincado en USA cerca de PaloAlto, fallecido hace unos años,un chalado de la comunicación y la teoría, de los pocos geniales que se han dado. Es autor de celebérrimos principios de acción como estos dos:

“Si quieres ver, ponte a actuar”

“Obra siempre de manera que tu acción aumente el número de alternativas posibles”.

Pero Von Foerster no es un autor/salero: su construcción de ideas es para estudiarla despacio. Lo más importante, como le ocurre a su descubridor y amigo, Paul Watzlawick, es que  este autor construye libertad en su teoría, ampliando con verdadera creatividad el pensamiento académico pedante y ensimismado.  Von Foerster era muy valiente. Se atreve a afirmar que solamente podemos escribir acerca de nosotros mismos, y ello no ha de avergonzarnos.  Se atreve a decir que la Ética es algo que puede manifestarse, pero no explicitarse, ni articularse en lógicas o fundamentos. Se atreve a decir que la ética es una lógica que reside en la acción misma, un sistema de premio y castigo que se satisface en la propia acción. La ética es cómo vivir, y viviendo es como uno descubre la ética.

La ética solo existe en el mundo de libertad en el que uno puede escoger hacer las cosas o no hacerlas. Y ese mundo de libertad se instituye por el individuo mismo, cuando en lugar de la necesidad, obra por su libertad. Eso sí que es valiente. Dice Foerster:! el complemento de la necesidad no es la oportunidad, sino la elección!

Vivimos en un mundo imposible y lleno de paradojas. Ese mundo es absolutamente ilógico. No puede articularse y es imposible su justificación. Pero precisamente por ello somos libres, y podemos respirar como queramos en ese mundo absolutamente absurdo, sin límites. Estamos condenados a la libertad, dice Foerster. Y si estamos condenados a la libertad, entonces debemos obrar para ser felices, somos responsables de nuestra felicidad.

Si hay algo que te acucia, y te sientes esclavizado, debes aceptar su presión y dejar de lado la oposición. Si no tienes ningún obstáculo delante y nada se te opone, debes aceptar esa libertad y no preocuparte de más. En cualquiera de las dos opciones tienes un mundo ante tí en el que lo primero que tienes que aceptar es la libertad de tu alma. Y a partir de ahí, que debes dibujar tu propia vida: danzar tu propia danza de Lenguaje, como la llama Von Foerster, con los demás.

La poesía lo dice mejor:

 

El cielo no hace nada: ese no hacer nada es su dignidad;

la tierra no hace nada: ese no hacer nada es su descanso;

De la unión de ambos no-hacer-nada surge toda acción

Y de ella emergen todas las cosas.